miércoles, 9 de julio de 2014

GPS.

 
Mi experiencia con los GPS es un tanto confusa.

No me fío. Me ha llevado donde no he querido, me ha perdido cuando estaba más cerca del destino, y esa vocecita...esa vocecitaaaa.

Es como un mal director espiritual, o un mal médico, o un mal profesor, que no se amolda a la pobre alma atribulada, o al paciente, o al alumno. No. El GPS va a su puta bola. Él sabe lo que tienes que hacer, y no cuenta con la torpeza del usuario. Por lo menos podría decir “ no te preocupes, cariño, da la vuelta cuando puedas”. O aconsejar “ anda, déjalo. Para cuando puedas y sácate el moco. Luego ya, si eso, seguimos”.

No sé, un poco de atención personalizada.

Recuerdan a la partición que hizo Mountbatten al ejecutar el mandato del primer ministro británico en la época de realizar el proceso de transferencia e independencia de la India británica en dos modernos estados. Lo que se dibujó en un mapa, en la realidad fue un desastre que causó miles de muertos.

Eso de hacer mapas no tiene nada que ver con la realidad. La vida va por otro lado. Ajusta el mapa a tus propósitos, y no te fíes mucho. Ni de mapas, ni de directores espirituales, ni de maestros, ni de médicos. 

¿No te sucede a veces que estás cansado de todos las imposturas, de los tópicos que te acechan, de las rutinas tramposas, de las pautas, de los procesos, de las herramientas...?

A mi sí. Tal vez estoy cansado.

Hay momentos que quisiera confesarme, y no encuentro con quién.

Hoy quisiera confesarme, como cuando era un crío, con ese capuchino de barbas blancas...pero está ese jodido “propósito de la enmienda”.

2 comentarios:

  1. A cuatrocientos metros, en la rotonda, tome la tercera salida.
    Bien, ahora en el cruce, incorporese a la autovia, direccion Sepulveda.
    Ahora, mantengase en el carril derecho durante quince kilometros.
    Mire a su derecha, hay un campo de trigo de cojon de pato.
    Saque su mano izquierda por la ventanilla y compruebe la aeronavegabilidad de su extremidad. Alucine.
    A trescientos metros zona de descanso, te vas parando, figura.
    Salga del vehiculo y efectue un recorrido peatonal por el susodicho campo.
    Hacia tiempo, eh chavalin ?
    No se lo piense y mire al cielo, parece mentira pero por alli pilota el Creador.
    Nuestra base de datos carece de sus coordenadas.
    Y la tuya, listillo.
    Bien, no te acojones y charla con El. Ni tiene radar ni te endingara una sancion.
    No es su negocio.
    Cuentale tus cosas, se sincero, abrele tu alma y que no se te olvide reconocer las grandes cagadas que sueles hacer. Tranqui, El curro una temporada en La Tierra, nada de lo que le digas le sera ajeno.
    Bien, mirale y mira tu alma. Por muy jodido que este el trafico, asi, tu y El, en pelota pica, estais condenados a entenderos.
    ...
    Vuelva al vehiculo y prosiga su ruta.
    Esta usted perdonado, caballero.

    Prosiga hasta la siguiente area de servicio.
    Y haga algo por los demas.

    Te vas a sentir de puta madre.

    ResponderEliminar
  2. para mi el truco de cualquier GPS es ponerle un nombre. El nuestro se llama Begoña. A veces parece uno de nosotros, que somos 6 y no 5.
    Igual en la oración. Él tiene nombre. Y me llama por el mío. Ayuda mucho.

    ResponderEliminar