viernes, 28 de febrero de 2014

LA AUSENCIA PRESENTIDA.


No hay conocimiento fuera del amor.

Donde no llega el amor está lo desconocido, el exilio.

En ese exilio viví muchos años...podía reconocerte porque siempre soñé contigo, aunque no supiera exactamente como eras, ni como te llamabas. Eras la que un día aparecerías a la vuelta de la esquina, o en la barra de un bar, en una estación de tren, en la cola del cajero, o en un supermercado.

Te adivinaba ya desde hacía mucho tiempo, en el frescor de las madrugadas andarinas, en el goce de la lectura de un buen libro, o en mis tristes silencios. Eras la esperanza de las grandes cosas, la belleza que vendría.

Apareciste en la barra del Otelo, y supe que eras tú...¡te había visto hace tantos años!

¿Y cuando tú no estés?

Quien no ha conocido el dolor de una ausencia presentida nada sabe del amor.

martes, 25 de febrero de 2014

EL PABILO.

Antes de actualizar la entrada me didrijo al Santo Cuore de Giesù, una iglesia de los salesianos cercana al hotel.

No hay nadie. La primera Misa es a las 6. 30 h...

Estos dias  hemos visitado muchas iglesias, y casi nadie reza. Es un bullir de anònimos que van de aquì para allà como troncos arrastrados por la corriente que les lleva a impulsos de no se sabe quièn.

Hay una vela encendida en este Cuorre de Giesù. Esa sì que reza.

Allì està, sola. Probablemente lleve toda la noche dando luz, consumièndose, perdiendo toda su sangre, que tiene el color de la cera. Pronto esa mecha se extinguirà hasta el final, dàndolo todo, cuando el pàbilo bocanee y un hilo de humo exhale ese  perfume de las cosas que se apagan

Pero habrà dado  todo por una intenciòn que alguien dejò encendida.

- Vete- le dice la candela- yo me encargo.

Ese cirio no se reservò nada para èl, ha dado todo lo que es, y ese don pasa a ser luz, fuego, calor.

Enciendo una vela. Todos somos velas, algunos  cirios, pocos antorchas.

Todos nos estamos  consumiendo...o no.

MIRAME.

Recuerdo de chaval ir a las ferias con mis padres, en Zaragoza. Cuando las ferias eran un estallido de diversiones provincianas: el tren Chuchu, caballitos, enormes nubes de algodòn de azucar, el "Galeòn" , la noria...mis padres nos acompanaban , y al mio, le gusaba tirar  con una escopeta de perdigones  a una diana.

Aun guardamos en casa una fotografia de mi padre con el ojo guinando a la diana.

Carlos, mi padre, era un hombre que no imponia sus gustos. Le hubiese gustado que hubièsemos  tenido  aficiones de nivel cultural. Los  tres primeros hermanos tuvimos una profesora particula de piano. Una mujer anacrònica,  fea, de una timidez Victoriana.

De los tres , sòlo Marisol sabe leer e interpretar, saborear , disfrutar y gozar de la musica. Y hacerla disfutar.

Mi hermano tampoco es manco...pero, en fin, otra cosa.

A mi , en las ferias, o en alguna excursiòn , cuando hacia algo que me parecia extraordinario- ponerme de pie en el Galeòn, subirme a un caballo en la montana  pastando en una pradera, ofecer mi mano a una vaca para que lamiera un poco de sal...- le  gritaba, "mira, papà, mira!"

Despuès supe  que todos  reclamamos esa mirada de un padre (incluso un jefe es una imagen de esa paternidad), y que algunos jamàs han sentido. Eso explica muchas cosas en algunas personas...

En todas partes se escuchan esas palabras "mira, papà!".

En todas partes la llamada, en todas partes el exilio y el hambre de un amor verdadero, los ojos del otro, de la otra: "mira, Suso!"..."mira Manu!"..."mira, Luis...mira...mira Marta". Escribe el nombre que quieras porque aqui caben todos.

Y  ese "mira Padre! ", Dònde està? , què se hizo de ese Padre que por màs vueltas que doy a la Noria no lo encuentro para que vea lo chulo que voy de pie ?.Dònde està ,ahora, que estoy  llorando en un ciberg y   me parece que  me voy a  quedar sin la mirada que màs necesito?
(No hay algunos acentos en los teclados, lo siento)





lunes, 24 de febrero de 2014

UN ENCUENTRO

Llegamos a la plaza del Vaticano y la encontramos repleta de gente. 

Se celabraba  la misa con los nuevos cardenales.

Fuimos a parar de manera casual a una zona donde resultò salian todos los asistentes al interior de la basilica. Mucho rojo cardenalicio, pues asistieron todos ellos. Era una pasarela de un colorido de sotanas  maravilloso. Y de razas.

Observo un nuevo cardenal. Le espera su familia, un reducido grupo de unas 20 personas venidas de Burkina Faso.Son gente sencilla, vestidas algunas, las mayores, con sus galas tribales. Se muestran de una felicidad radiante y contagiosa.

El nuevo cardenal es hombre alto, timido, no tiene los aires seguros, vanidosos de otros colegas. No sabe què hacer. Se està haciendo fotos con toda la familia...uno a uno, en grupo, con la abuela y la madre, con la madre y otro sacerdote...el hombre se deja hacer.

A mi lado un cura joven, bien plantado, de una mirada clara. Tiene pinta de nuevo secretario de cardenal.

- Podria darle la bendiciòn a mi mujer, està enferma.

No entiende, habla francès. Senalo a Manu y le digo "molt malade".

Me contesta que no le corresponde a èl...mejor el cardenal.

Nos acerca al prelado, casi dos metros de negro con cara de hombre desconfiado porque no acaba de entender la razòn de sacarle de la algarabia de su gente. Va bien guapo el cardenal en su estreno.

Le  presento como puedo a Manuela, que se deja llevar.

Le impone las manos sobre la cabeza y reza una bendiciòn larga, sentida. Vuelvo a tener la misma sensaciòn que con Juan Pablo II. No hay tiempo, no siento la temperatura, todo cobra una nueva dimensiòn. 





Sale Manuela llorando. Yo voy en busca del secretario para darle las gracias.

Luego vimos el Vaticano...luego, cada uno  se rumiò  lo que sucediò.

Luego, ya veremos...



domingo, 23 de febrero de 2014

SOLAMENTE POR HOY.

Allá va un texto de el Papa Bueno de los que de vez en cuando releo, para ver qué tal voy. Un decálogo sencillo.

Hoy visitamos El Vaticano...

1. Sólo por hoy trataré de vivir exclusivamente el día, sin querer resolver el problema de mi vida todo de una vez.

2. Sólo por hoy tendré el máximo cuidado de mi aspecto: cortés en mis maneras, no criticaré a nadie y no pretenderé mejorar o disciplinar a nadie, sino a mi mismo.

3. Sólo por hoy seré feliz en la certeza de que he sido creado para la felicidad, no sólo en el otro mundo, sino en este también.

4. Sólo por hoy me adaptaré a las circunstancias, sin pretender que las circunstancias se adapten todas a mis deseos.

5. Sólo por hoy dedicaré diez minutos de mi tiempo a una buena lectura; recordando que, como el alimento es necesario para la vida del cuerpo, así la buena lectura es necesaria para la vida del alma.

6. Sólo por hoy haré una buena acción y no lo diré a nadie.

7. Sólo por hoy haré por lo menos una cosa que no deseo hacer; y si me sintiera ofendido en mis sentimientos procuraré que nadie se entere.

8. Sólo por hoy me haré un programa detallado. Quizá no lo cumpliré cabalmente, pero lo redactaré. Y me guardaré de dos calamidades: la prisa y la indecisión.

9. Sólo por hoy creeré firmemente aunque las circunstancias demuestren lo contrario- que la buena providencia de Dios se ocupa de mí como si nadie existiera en el mundo.


10. Sólo por hoy no tendré temores. De manera particular no tendré miedo de gozar de lo que es bello y de creer en la bondad. 

sábado, 22 de febrero de 2014

COMO SI NO HUBIERA MANANA



“El hombre es consciente de sí mismo, de los demás, de su pasado y de sus posibilidades futuras. 

Es consciente de su autodeterminación, de la brevedad de su vida, de que nace sin su consentimiento y perece en contra de su voluntad, consciente de que morirá antes que aquellos que ama, o aquellos que ama morirán antes que él.

Es consciente de su carácter separado, de su impotencia ante las fuerzas de la naturaleza y de la sociedad. Todo esto hace de su existencia solitaria una prisión insoportable.

El hombre sabe que se volvería loco si no pudiera liberarse de esta prisión y unirse, de alguna forma, a otro ser humano “(FROMM).

Una vez me sentí así, como cuenta Fromm. Solo, lejos de todo interés por nadie, abandonado a lo peor de mi mismo. Con mucho miedo a dejarme caer.

En realidad, cada historia de amor es única y su final imprevisible. Días antes del anuncio de la enfermedad me encontraba ganando puntos y  recuperando terreno.Tenía a Manu de morros. Las zamoranas, de morros, son durísimas, y con razón.

Y todo cambió. Lo nuestro  ahora es  intenso y duradero. En la mayoría de los casos la pasión del enamoramiento se transforma en lazos más estables de cariño y amistad y, probablemente era hacía dónde nos dirigíamos.

 Pero hoy hemos dado un paso tan gigantesco, que vivimos queriéndonos “como si no hubiera mañana”.

viernes, 21 de febrero de 2014

TRADICIONES.

Regresábamos de visitar en León a Carla, la niña que disfruta Manuela con pasión.
 
De sopetón me dice , “¡me da pena estar quince días sin verla!”...
 
Nos vamos a Roma y esa pena tiene.
 
-        ¿Pero, porqué la quieres tanto?- le pregunto.
-        Yo me crié en casa de su madre y , cuando nació ésta, hice lo mismo: no esperaba más que llegara el viernes para ir al pueblo a estar con ella. Y ahora me sucede lo mismo.
 
No termino de conocer a esta mujer. El envoltorio se presenta , a veces, arisco, seco, nada zalamero...¡y es un corazón con patas!
 
Sobre todo, no es narcisista. Los hombres y mujeres narcisistas están emocionalmente extasiados, ensimismados, no se pueden unir ni identificar con otra persona porque son incapaces de suspender su desconfianza e incredulidad en el prójimo, lo que les permitiría entrar con amor e imaginación en la vida de los  demàs, compartir genuinamente sus circunstancias y respetar su existencia independiente.
 
Manuela  es heredera de un mundo tradicional que se está desvaneciendo.
 
Así, cuando la procreación era esencial para la supervivencia de la especie, los hogares compuestos de hombres proveedores y mujeres prolíficas eran obligados a estar alli. Y en esos hogares, con ramificaciones familiares muy solidarias (los tíos, primos, abuelos...), se vivía compartiéndolo todo.
 
Hoy todo eso ha cambiado, excepto en bastantes Manuelas. Y yo, descubro ese tesoro.

jueves, 20 de febrero de 2014

¡A ROMA!


Hoy viajamos a Roma.

Será una semana “barullana” en todos los sentidos.

No sé si podré actualizar el Barullo. Sé que echaré a faltar la cita diaria.

Y sé que estaréis cerca, sobre todo esta pequeña familia de casi 200 del  Pábilo ( que, encima, nos conocemos...¿diez?.

Yo voy con una intención, y sólo una...


miércoles, 19 de febrero de 2014

LA PIEDRA (TEXTO ANÓNIMO)



"El distraído tropezó con ella.
El violento la utilizó como proyectil.
El emprendedor construyó con ella.
El campesino cansado la utilizó como asiento.
Para los niños fue como un juguete.
David mató a Goliat y Miguel Ángel le sacó la más bella escultura.  
En todos los casos, la diferencia no estuvo en la piedra, sino en el hombre. No existe piedra en el camino que no puedas aprovechar para tu propio crecimiento".
(Para los que están en el ajo...LA PIEDRA, fui yo). 

martes, 18 de febrero de 2014

CANSADOS.

Llevo unos 4.000 días aquí, de los cuales, entre contri desperté  de la infancia, y entri contri horas dormí, y contri contri horas dedicadas a pensar en el sexo, en  historias imaginadas y el que perdí  intentando lograr estupideces que nunca alcancé , ¿ en qué queda todo?  ( la tribu "nosotras" supongo lo perderá de otra manera).

Y no olvides que los últimos diez años el pescado está vendido.

Aprende algo todos los días.

¿Te das cuenta que has nacido en la mejor zona del mundo?. Mil kilómetros más abajo y estás en el subsáhara, colega. Moscas, más moscas, olores imposibles, jamalají jamalajá, un calor axisiante, unas bragas como envoltorios de madalena. Y si es más parriba, un frío polar, gente seria y estirada, poca luz...Has tenido suerte, amig@, va siendo hora de que te des cuenta.

¿Dónde se come mejor que aquí?, ¿dónde hay una siestecita como costumbre nacional?, ¿dónde más libertad y libertinaje que aquí?. ¡Pues aprovecha, mujer, hombre, trabajador y trabajadora!.

Para un rato todos los días y mira con ojos nuevos tu casa, tu familia, tu calle, el lugar de tu trabajo, el bareto que visitas o la ventana de tu habitación. Cambia de perspectiva. Visita la casa de enfrente y mira desde allí la tuya:¡verás qué transformación!

No se trata de vivir durando. Esa es la lección que hay que aprender: El pesimismo no consiste en estar cansado del mal, sino en estar cansado del bien. La desesperación no consiste en estar cansado del sufrimiento, sino en estar cansado de la alegría.

En eso estamos... 


lunes, 17 de febrero de 2014

LA FORJA.


Hay una idea muy común en los cuentos y leyendas de siempre, y de todos los lugares: la de que los objetos están impregnados del espíritu con el que han sido hechos. Tienen, los objetos, algo mágico que les trasciende, y que depende de su origen.

En el Señor de los Anillos los elfos de Lórien entregan a los expedicionarios unas capuchas y unas capas, «de esa tela sedosa, liviana y abrigada que tejían los Galadrim. Era difícil saber de qué color era: dependiendo del movimiento y de los cambios de luz cambiaban de color. Colores maravillosos.

—¿Son mantos mágicos? —preguntó Pippin mirándolos con asombro.

—No sé a qué te refieres —dijo el jefe de los Elfos—. Son vestiduras hermosas, y la tela es buena, pues ha sido tejida en este país. Son por cierto ropas élficas, si eso querías decir. Hoja y rama, agua y piedra: tienen el color y la belleza de todas esas cosas que amamos a la luz del crepúsculo en Lórien, pues EN TODO LO QUE HACEMOS PONEMOS EL PENSAMIENTO DE TODO LO QUE AMAMOS”.

Me gusta pensar que muchas de las cosas que nos rodean están hechas con respeto, con amor, con una intención que las hace sagradas ( no me refiro a la Religión, aunque sí).

Y otras no. Hay cosas malas. Hay gente mala.

Se está forjando en el dolor de Manuela un alma , está poniendo el pensamiento en todo lo que ama.

Y,a veces, lo sé, tiene miedo.

domingo, 16 de febrero de 2014

EL MEJOR REGALO.



Esta señora se llama Josefa.

Es la madre de Manuela. 

Es mi madre también.

La veis así, como un personaje de Harry Potter, porque lo es: esta mujer tiene poderes. Es de esas personas que hacen milagros. Tiene ochenta y muchos años, una mala salud de hierro, un corazón oceánico, y una fe sin beaterías, ni histerias, ni tonterías.

Sólo os diré que no he conocido nadie como ella. Nadie.

Ya sabéis la vieja tradición de poner en la mesa un plato de más para un visitante imprevisto. Josefa es así. Fue así antes de conocerme, y es así hoy. Es en esas mesas donde mejor estoy.

Estos días está en casa con nosotros. Josefa no sabe nada de la situación en la que estamos. Sabe que algo anda mal, y poco más...

LLegué de trabajar el día de san Valentín  y me dice guasona, "ha llegado una carta para ti".

Y encuentro una nota escrita en un papelucho que habría recortado vaya usted a saber cómo, escrita con una caligrafía temblorosa, infantil, pero muy clara, y un dibujo de una candidez de parvulario donde se supone que Manu y yo estamos  regalándonos una flor, y leo: "con mucho cariño y mucho amor hoy día de los enamorados , os quiero mucho.

San Valentín".

¡Dios!, ¡qué dentro me llegó ese obsequio!.

Lo plastifiqué y, quizás, un día de estos lo suba al blog para pasmo del mundo, y ejemplo de las generaciones venideras.

sábado, 15 de febrero de 2014

TRANSFORMADOS.


Hay algo que sé con toda seguridad: de ésta situación saldremos mucha gente transformados.
En mi vida, y en las de otros que viví de cerca, desperté otra conciencia gracias a que ocurrieron situaciones muy difíciles, algunas inesperadas, que te obligan, o a tocar fondo, o a un inevitable cruce de caminos, y te adentras en un profundo túnel que parece no tener salida ni fin.
Sin embargo,en la mayoría de las ocasiones ese hecho se convierte en la plataforma de transformación de tu vida.
La pregunta es, ¿qué sucede allá dento para que se produzca casi en el cien por cien de esas situaciones una mejora personal?.
Sucede que , quizás por primera vez en tu vida, decides por ti mismo.
Hasta entonces hemos permanecido sumergidos en la rutina, envueltos en una falsa seguridad. Todo iba en un raíl de una vía de un tren Chuchú realizando siempre el mismo viaje, dando vueltas siempre en círculo, y con el aliciente infantil  que de vez en cuando aparece la bruja con la escoba y nos distraiga con una amenaza zascandil.
No tenemos tiempo para reflexionar sobre nuestro destino, sobre el sentido de nuestras vidas. Seguimos corriendo de un lado para otro, cumpliendo con las obligaciones diarias, viviendo o tal vez sobreviviendo en la conformidad y la inercia.
Y, ahora, ¡zas!. Se acerca el momento, poco a poco, que nos cambiará para siempre...para bien.

viernes, 14 de febrero de 2014

LAS RAZÓNES DEL QUERER.


Para sanarte de cualquier enfermedad, ya sea física o moral, necesitas querer ser curado. Tienes que soñarla con todas tus fuerzas. El “tu fe te ha salvado” sigue siendo la razón que explica nuestros logros.

Nadie triunfa más allá de sus sueños más fantásticos, a menos que comience teniendo sueños fantásticos,

Probablemente, la razón de haberte conocido fue que te había imaginado tal y como eras...luego llegaste tú.

jueves, 13 de febrero de 2014

DESANDAR LO ANDADO (VOLVER A NACER).


Estos días vamos mucho a visitar a Carla. Carla está recién nacida, y Manuela se extasía con ella. 

Pienso en Carla, en Manuela, en mi... 

Nacemos sin un idioma definido. También nacemos sin ideas preconcebidas sobre nosotros mismos; simplemente ése bebé es así, no se juzga, ni se valora, o compara. Carla pronto se formará una imagen de ella, y dependerá de su educación, de sus experiencias, de su entorno, del ambiente que respire. 

No es el caso, pues sus padres viven en la sencillez, ¡pero le influirán tantas cosas! 

Lo primero es el nombre, que ya comienza a escuchar con amor. Hoy está rodeada de mucho cariño. 

Me recuerdo en mi biografía y evoco las dudas que me transmitieron, mis miedos , mis timideces, la formación en una religión de morales rígidas, alguna muy atormentada. Escuchaba opiniones que me afectaban mucho: qué simpático, qué vago, qué guarro, qué soso, qué desastre...qué haremos de ti. 

Nace una sexualidad enmarañada, compleja, sucia. 

Sin saberlo, vamos absorbiendo todas esas opiniones y experiencias que nuestro cerebro graba y transforma en creencias, las cuales, a su vez, van moldeando nuestra identidad hasta llegar a convertirse en nuestra realidad, en lo que creemos que somos. 

Pienso en Manuela. Es una mujer con muy pocas raíces, ¿cómo lo diría?, “ideológicas”. No tiene una conciencia formada exclusivamente en la religión, o en la política, o en el sexo, o en desvaríos fanáticos. Todo se basa en muy pocas verdades, pero muy sólidas: la familia, la tierra, el amor por lo concreto, sus pequeñas y muy afianzadas fidelidades. 

Con Manuela comencé un camino nuevo, ¡tan difícil para mi!: el de desprenderme de muchas tonterías adquiridas que me hicieron mucho daño.

Volver a nacer, de alguna manera.

miércoles, 12 de febrero de 2014

MANUELADOLID.


Leo una especie de autobiografía donde el autor hace una admirable y sencilla descripción de Nueva York...”he vivido en la ciudad de Nueva York casi toda mi vida. Y me sigue encantando: sus restaurantes, el ritmo de la ciudad, la gente. Y esos perritos calientes de los puestos callejeros… son increíbles. Sí, me encanta comer, para mí es uno de los mejores placeres de la vida, junto con una buena conversación, mis deportes favoritos y los buenos libros.

En fin, que no hay otro sitio en el mundo como la Gran Manzana. No tengo ninguna intención de marcharme de aquí. Nunca”.

Me ha llegado muy dentro esta consideración. Para mi , Valladolid sólo tiene sentido con Manuela. Esta ciudad se llama “Manueladolid”. Sin ella me encontraría desarraigado. Y sólo me quedaré aquí con ella.

martes, 11 de febrero de 2014

UN MARTES CUALQUIERA.


Fue en una casa de ejercicios espirituales cerca de Sant Sadurní.

Él era un profesor universitario, abogado de prestigio, de los que se presentan partiendo la pana y pisando moqueta.

Soltero talludito. Egoista. Conocer a un buen amigo de la prelatura le permitió arrimarse al calor de una familia de cierta alta burguesía, que le acogió y, digamos, le maquilló y le dio forma.

Quiso hablar conmigo. Estaba pasando una crisis morrocotuda, ya no tocaba pie en el mar de su vida. Sentía que todo había saltado por los aires. Probablemente, ese hombre estaba gestando una depresión que, como una niebla pastosa, le rodeaba y angustiaba.

Lloraba al hablar de los recuerdos de su vida:

“Mi madre era la persona más buena que he conocido. Mi padre, la persona más decidida. Gente decente y humilde. No eran perfectos, pero quién lo es. Lo importante es que siempre hicieron las cosas lo mejor que pudieron. Y, para mí, hacerlo lo mejor que puedes es hacer todo lo que puedes. Mi padre era taxista, un hombre cabal que le recuerdo llegando agotado a casa y acostarse tranquilo.

Llegué a avergonzarme de ellos por su condición humilde, y sus lagunas educativas.

Todo iba bien hasta que me dejó mi novia, hace un mes. Y todo mi mundo se deshizo como una pompa de jabón.

Regresé a casa de mis padres. Me preguntaba cómo habían conseguido llevar una vida estable y feliz tantos años. Nunca me habían parecido unas personas a imitar socialmente. No eran un modelo del tipo de vida que quería para mi y, ahora, comenzaba a entenderlo todo.

Le conté a mi padre la situación por la que estaba pasando, e hice la gran pregunta...

- ¿Qué habéis hecho para que todo os haya ido bien entre vosotros?

Mi padre me señaló una talla de la Virgen que hay en la entrada de casa y contestó:

- Todos los días , de madrugada, al salir de casa acaricio esta imagen y le pido que nos ayude ese día a tu madre, a ti, a mi...cuando regreso, todos los días, le doy las gracias....yo creo que esa ha sido la razón de lo que tú llamas “ir bien”.

No creo en cierto tipo de santidad, pero sí en esas vidas ejemplares, sencillas, humildes...esa gente que sabe que la mayoría de las cosas que tanto nos preocupan no suceden jamás. 

Kurt Vonnegut lo expresó estupendamente: «Los problemas reales de la vida suelen ser cosas en las que ni siquiera se nos ha ocurrido pensar, cosas que de pronto te asaltan a las cuatro de la tarde un martes cualquiera»

lunes, 10 de febrero de 2014

FUGACIDAD.


En una tertulia nocturna amena y desenfadada, sin prisas, comentaba el poeta Beades que el paso del tiempo y su fugacidad es el tema del cine actual, de la literatura y de la poesía.

Es una verdad amarga descubrir que todo se marchita. Desde la emoción maravillosa de los amantes, hasta el momento mágico de la inspiración de los poetas, o el cantar en una noche distinta a cualquier otra, o esos momentos de felicidad que quisiéramos que no se nos escaparan y detenerlos para siempre....como ese baile una fría madrugada, con las ventanas del coche abiertas al sonido de una balada de Van Morrison.

Todo es fugaz, como un leve estremecimiento. Como el gesto de esa mujer enamorada que te agarra el brazo y señala el suyo con un “¡mira!” y ves que tiene los vellos erizados , la piel de gallina, emocionada porque está feliz a tu lado. El que ha sentido eso sabe de qué hablo.

Lo que dura es la costumbre, el trabajo bien hecho del sabio , o del artesano, durante años. La fidelidad de dos viejos esposos, que también tiene mucho de costumbre.

La mandíbula del esqueleto, que es de una dureza de siglos, mantiene su rictus inmóvil, y se deshojaron los labios que rieron, que besaron...se apagarán los ojos que lloraron, el brillo de las miradas...eso es lo que queda, un esqueleto.

Parece que estamos condenados a elegir entre una inconstancia viva, que no atrapamos, y que con el tiempo nos vuelve cínicos, despegados, o condenados a una fidelidad muerta.

Pero no, hay salida. ¿porqué si no todos los amante del mundo presienten ese parentesco de un modo misterioso entre fugacidad y eternidad que en medio de la exaltación fugaz de los besos y de amor gritan “¡siempre!, ¡para siempre!” .

Ese “siempre” es un desafío al tiempo, a la muerte y a la eternidad.

domingo, 9 de febrero de 2014

NOS DESCUBRE.


La enfermedad no cambia a la gente, la descubre.

¿Qué nos descubre la enfermedad de las personas?: sus principios.

Tenemos la mala costumbre de juzgar a las personas por el objeto de su amor. Y es un error,¡como si cualquier amor no pudiera dirigirse a cualquier objeto!

Por ejemplo, uno puede ser coleccionista de valiosas pinturas como nuevo rico porcino y hortera, o como contemplativo. La diferencia está en el interior de cada uno, en sus principios. El hortera sólo ve lo que le ha costado, y lo dice. Probablemente también se canse de verlas siempre allí, en esas paredes.

El contemplativo no se cansa de observarlas, nunca.Y aunque no sea su propietario, las hace suyas.

La enfermedad nos descubre, al enfermo, y a ti...¡si lo sabes interpretar!

sábado, 8 de febrero de 2014

LA VIDA.


La vida,¡tan absurda!... 

Parece que al nacer nos ofrecen un instrumento para que interpretemos en público una obra, la nuestra, mientras que aprendemos torpemente su técnica sobre la marcha. Y , con frecuencia, de manera autodidacta.

O, peor, los profesores que nos han enseñado la técnica del vivir, no sirvieron para nada, tuvimos que romper la partitura y volver a empezar...¡y siempre sobre la marcha! 

Y todo ¿para qué?. Para terminar muriendo.

Me dice un médico que padece cáncer: “he visto morir a mucha gente, pero lo malo de mi enfermedad es que es la primera vez que me sucede y, me temo, la última. A eso no estaba acostumbrado”. 

Ese instrumento que nos ha sido dado graciosamente es el cuerpo, con su alma, su carácter, sus talentos...y la pieza que estamos interpretando, piénsalo, puede ser una mierda de canción – algo así como un solo de serrucho – o una maravillosa sonata, una sencilla y admirable nana, o la conmovedora melodía inacabada de un genio...

viernes, 7 de febrero de 2014

EL TIEMPO NO ES TU ELEMENTO NATURAL.


«No dejamos de asombrarnos del paso del tiempo: “Pero ¡cómo! ¡Si parece que era ayer cuando ese padre de familia era aún un chaval con pantalón corto!”. Lo que viene a demostrar que el tiempo no es nuestro elemento natural. ¿Es posible imaginar a un pez que se asombre de que el agua moje?

Es que nuestra verdadera patria es la eternidad; nosotros no somos más que visitantes de paso en el tiempo.

Eso no impide que sea en el tiempo en donde el hombre construya la catedral de Chartres, pinte el techo de la Capilla Sixtina o toque una cítara de siete cuerdas”». (LEYS SIMON)

¡Es tan breve la vida!...vívela con intensidad, y deja tu huella: sólo durarán los recuerdos que dejemos. Sólo el amor.


jueves, 6 de febrero de 2014

LA HISTORIA DE HOY.

La historia de hoy no la  puedo contar, o la escribo así como...Sonaría un poco fuerte (hay que escribirla bien).

Fuimos a la neuróloga...otra doctora  le inyectó un algo para que no salivara tanto ( la ELA, o, esta ELA ,tiene sus cosas personales , es muy suya)  ...y apareció Henar con su uniforme de enfermera

Preguntó la doctora, al verla con uniforme, que quien era...

Y Manu, con esa torpeza simpática que tiene al hablar, dijo..."es mi amiga, mi hermana, mi madre...y cuando me muera... éste (por mi)  irá a por ella".

"Éste" era yo. 

Podéis imaginar las caras de la neuróloga, la doctora, su auxiliar, y el teléfono  del despacho...

Todo tiene un sentido.La primera vez que Manuela me presentó a Henar le dije (delante de Manuela)  " cuando me quede viudo, iré  a por ti". Esto fue hace unos años.

Henar es guapa , tiene 26 años y, oye....

¡Qué maravilloso es el sentido del humor!
 


martes, 4 de febrero de 2014

TAN SENCILLA.


Cualquiera de nosotros puede contar el sufrimiento que ha tenido en su vida , algunos son estremecedores.

Y comprobamos que unos son felices y otros no, contando ese dolor.

 Unos siguen alimentando ese sufrimiento, recordándolo, rumiándolo, luchando por evitar que vaya a más, sin darse cuenta que esa es la manera de que crezca , se desarrolle y nos envuelva como una niebla.

Existe otra forma de vivir sin crear más sufrimiento a partir del que ya tienes. 

Porque el que manufactura su dolor es uno mismo, no el  que viene de afuera. Tú creas tu propio dolor . Como la araña, de tu propia baba creas la tela que lo atrapa todo a tu alrededor.

De Manu sé  que ese dolor lo vive con una delicadeza  tan sencilla...que  me avegüenza.


DIOS TE OIGA...


He vivido hasta hoy en la completa inopia, feliz y con una inconsciencia maravillosa.

Y he tratado que los que conmigo se han cruzado en mi camino compartieran esa manera de ver la vida.

Pero, ¡ay!, nunca amé hasta que me dolieras tanto.

¿Quién dijo eso de que “lo más triste de Dios es que no puede creer en Él? Y lo más triste de tu dolor es que no lo puedo compartir.

Hoy te escribí “esta batalla la vamos a ganar”, y contestaste “Dios te oiga”.

Bueno, pues a pesar de todo, de este golpe, de tanto dolor sordo, ciego, absurdo, innecesario. Aplastado por el silencio de un sinsentido  de ese Dios que también está solo, tan solo,  que no cree en Él. A pesar de todo eso, le pido una gracia.

¿No te das cuenta , Dios, que sin nosotros no eres Nadie?...¿qué te cuesta posar tu mano sobre su garganta y sanarla sólo unos cuantos años y dejarla madurar ?.

Además, Tú no puedes decir “¡gracias a Dios!”...¡deja, Hombre, que te lo podamos decir!

Creo que a esta entrada le sobraba un Jack's Daniels...

lunes, 3 de febrero de 2014

BUSCANDO LA VERDAD.


Llevo años queriendo conocerme más, aceptarme- incluso en los defectos de serie, algunos con taras tan manifiestas que no puedo negar- e intentando ser mejor persona.

Decidí, de un modo intenso y con rotundo empeño, buscar la verdad haciendo tabla rasa de todo lo aprendido. Y eso respecto a mi , y respecto a todo lo demás. Puse el cuenta kilómetros a cero, levanté el cartel de “ocupado” de mi taxi, y pasó a estar “libre”.

En estos años estoy a veces perplejo conmigo, otras ando perdido, aunque diciendo al que quiera escucharme “que sé dónde voy” (aunque no tengo ni idea de mi situación). Rezo muy poco, pero mucho mejor. Me dejo querer, que es , quizás, el mayor hallazgo que encontré estos años.

Pero,¡ay!, llegó la enfermedad , y me dio donde más duele: yo sin Manuela no soy nada.

Inesperadamente, me encuentro colgado de una cinta delgadísima sobre el abismo. Una cinta que hasta ahora me servía para adornar mi fe en hermosos paquetitos que regalaba con una frivolidad absurda, ¡tan pequeña!.

Pero , ahora, suspendido en la sima , aferrado a esa cinta de color rojo festivo, me temo que no soportará el peso de mi...¿fe?...¿pero era fe eso que tenía?

Soy como ese idiota que le pide a Dios que su equipo gane la final del Mundial de fútbol. Y gana su equipo, y el hombre llora, se emociona, levanta sus brazos al cielo, da gracias a Dios, y cuenta a todo el mundo su milagro...

¡Imbécil!, o sea, que Dios durante unos minutos ha dejado de matar niños hambrientos en África, suspendió la faena de una asociación de pedrastas que andaban intercambiando carne fresca de mocosillos, miró por tu milagro dejando de prestar atención a unas cuantas miles de clínicas abortistas que les va muy bien en el mundo, y todo para que Iniesta meta un gol.

¡Hay que ser gilipollas!...

Y Rajoy pidiendo que gane el PP, y Uriarte comulgando la Hostia agradeciendo el premio Sabino Arana (¡un tío que se supone que cree, nada más, y nada menos, que en la “transubstanciación del vino en la Sangre de Jesucristo!). Y Botín solicitando piadoso a la Virgen por su cuenta de resultados, y...

Siempre hay una mentira en la raíz de todo desánimo, un apartarse de la verdad, de la realidad.

Seguiré buscando esa verdad, que ya sé donde no está, suspendido, todavía, de esa cinta sobre el abismo.