jueves, 15 de mayo de 2014

ESTA ENFERMEDAD.


La enfermedad , esta enfermedad, nos ha llevado al único lugar donde ya no puedes hacer preguntas.

Manuela me encargó comprar geranios rojos y fucsias para el jardín.

Las rosas de la entrada están encendidas en sus colores, rosas amarillas, y otras de un rojo labial.

Es allí donde están las respuestas a las preguntas que no puedes hacer: en las plantas, en el cielo estrellado del último atardecer, en las manos que se acarician en silencio, en el acompasado respirar de la madrugada.

Hay que quererse más. Aún más.

1 comentario:

  1. A veces, el Desembarco de Normandia es un mensaje cariñoso.
    Otras, la batalla del Peloponeso se determina por una caricia.
    Incluso la Guerra de los Mundos se puede detener con la visita a una madre recien parida, llevando un ramo de claveles reventones.
    Parecen gestos ingenuos, de caracteres blandiblus, pero no.
    Al final la vida es llevadera por los gestos de los heroes anonimos.
    ...
    Coge a la criatura recien parida, elevala sobre tus hombros y repite su nombre en voz alta.
    Si miras hacia detras, veras a tu ejercito que te aclama.
    Te acabas de convertir en un general, en el lider absoluto.
    Y tus huestes iran donde tu quieras.
    ...
    Acabas de ganar la batalla, sin tan siquiera una baja.
    Eres un campeon.
    Y tu chica te manda a por flores.
    ...

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