¿Cómo has permitidos, Dios mío, algo
tan feo como la muerte?, esa cosa tan jodida.
¡Es tan hermosa la vida aquí!.
Supongo que valdrá la pena estar allí contigo, y que no echaremos a faltar la ausencia de los amores de aquí abajo, los de verdad, o la alegría tan maravillosa que produce un almendro florido, los colores de la madrugada, el sonido de alguna brisa, la pureza de tantas cosas que nos sorprenden todos los días.
Espero mucho amor en Ti, y una notable imaginación, para que a tu lado no se sienta la nostalgia de esta aventura que llamamos vida...¡en el cielo no puede haber nostalgias!
¡Es tan hermosa la vida aquí!.
Supongo que valdrá la pena estar allí contigo, y que no echaremos a faltar la ausencia de los amores de aquí abajo, los de verdad, o la alegría tan maravillosa que produce un almendro florido, los colores de la madrugada, el sonido de alguna brisa, la pureza de tantas cosas que nos sorprenden todos los días.
Espero mucho amor en Ti, y una notable imaginación, para que a tu lado no se sienta la nostalgia de esta aventura que llamamos vida...¡en el cielo no puede haber nostalgias!
¿Podrás separar a los que tan unidos
estuvimos aquí abajo? Porque, entonces, ¿qué sentido tiene todo el
Paraíso si no estamos junto a los que amamos de verdad?
seguro, estaremos con El, y rodeados de amor, luego tambien con ellos
ResponderEliminarEn el cielo no puede haber nostalgias. Qué idea tan bonita. me ha gustado mucho. Para que no haya nostalgias el corazón debe de estar muy lleno, a rebosar. A ver cómo se las ingenia Dios para llenarte a ti . Tendrá que buscar todos sus recursos imaginativos... porque en imaginación no hay quien te gane! Seguro que te sorprenderá. Un beso.
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